Yo ayudé tres días en la escuela Generalife enseñado inglés. Aunque yo empecé tarde a ayudar en la escuela, he hablado en cinco diferentes clases, de diferentes edades y niveles de inglés, de temas muy diversos. Enseñando inglés a los niños, me recordé de mi pasión a ensenar y ayudar a otros, muchas veces he pensado ser profesor.
Hablando con los niños de Generalife fue muy interesante. Al principio, los niños fueron muy simpáticos, y los profesores tuvieron mucha gana a ver sus alumnos aprendiendo, especialmente conmigo en el aula. Hablamos de mis intereses, mi vida en Norteamérica y mis experiencias aquí. También, hablamos de los intereses de los alumnos, profesores y nosotras opiniones políticas. Por ejemplo, hoy yo hablé con algunos alumnos de sus opiniones de la ambición de los españoles. Unas de las cosas más interesantes era la diferencia entre la opinión de la profesora y los alumnos. La profesora y los alumnos fueron en un desacuerdo total. La profesora pensaba que los jóvenes en España prefieran ser perezosos y esperar para que sus padres le ayuden. En el otro lado, los alumnos creían que no hay oportunidades para empezar a trabajar cuando tenga 15-23 años. Después de la clase, yo hablé con la profesora de sus opiniones más personales y su perspectiva en el tema. Aunque no voy a escribir sus pensamientos, yo pensé que la experiencia a mantener una conversación tan discutida con los alumnos y una profesora española fue increíble.
Disfruté la experiencia única, porque me encanta hablar con otras gentes de todas las edades de sus vidas, opiniones y perspectivas. Si hay una cosa que he aprendido durante mis experiencias en Europa, es que una mejor comprensión de más gente en el mundo sea importante en un mundo tan global. ¡Muchas gracias a los alumnos y profesores de la escuela Generalife!